Omita los permisos de trabajo en caliente: identifique posibles problemas en entornos explosivos sin la documentación


El mundo de la fabricación y producción peligrosas puede ser lo suficientemente complicado sin añadir elementos adicionales a su carga de trabajo. Los permisos de trabajo en caliente a menudo se consideran una parte esencial del trabajo en entornos peligrosos, pero ¿qué pasaría si pudiera inspeccionarlos sin tener que proporcionar grandes cantidades de papeleo?
Recientemente, una empresa multinacional de fabricación de productos químicos ha empezado a hacer exactamente eso, liberando tiempo y mano de obra para volver a implementarse en toda su plantilla.
Normalmente, la inspección en entornos peligrosos de zona 2 requiere que un gerente apruebe un permiso de trabajo en caliente. Esto puede consistir en una extensa documentación manual y requiere que el trabajo cese durante al menos una hora antes de la inspección. También requiere que todos los materiales potencialmente explosivos (como el polvo y los gases combustibles) se midan y supervisen cuidadosamente para reducir la posibilidad de ignición.
Para inspeccionar los componentes clave de la maquinaria en estos entornos difíciles, las cámaras térmicas se utilizan a menudo para identificar puntos calientes, medir la temperatura de la maquinaria y comprobar que piezas como las válvulas funcionan dentro de los parámetros esperados. Lamentablemente, estas cámaras suponen un riesgo indirecto para la seguridad de las propias instalaciones porque no son intrínsecamente seguras por diseño, por lo que los permisos de trabajo en caliente deben aprobarse antes de su uso.

La FLIR Cx5 es una cámara térmica diseñada específicamente para proporcionar inspecciones más seguras en ubicaciones peligrosas. La carcasa resistente que recubre la cámara térmica alimentada por iones de litio garantiza una termografía de alto rendimiento sin el riesgo inherente asociado con productos no intrínsecamente seguros.
Ya sea en ubicaciones peligrosas que traten con gas, vapor, polvo o (en este caso) productos químicos combustibles, elimina por completo la necesidad de permisos de trabajo en caliente.
En esta planta química, permite a los operadores inspeccionar de forma segura áreas que se enfrentan al calor extremo, como el refractario que funciona a 1400 °C en su núcleo. Los operadores pueden ver claramente la temperatura externa de la embarcación revestida de ladrillo y comprobar que funciona según las directrices. La FLIR Cx5 también se utiliza en esta instalación para supervisar las bombas de rotor, la temperatura de los cojinetes y el nivel de líquido dentro de los recipientes.
Un portavoz de la instalación explica: «El uso de equipos certificados para áreas peligrosas siempre es preferible, ya que se elimina la fuente de ignición y no se requiere un permiso de trabajo en caliente.
«La generación de un permiso de trabajo en caliente requiere mucho trabajo, ya que se debe realizar una solicitud, el permiso de trabajo preparado y todas las áreas aplicables confirmadas sin gases inflamables (y, por supuesto, esto solo confirma que no hay gases inflamables en ese momento). En general, probablemente estamos analizando 3 horas de trabajo para cada inspección individual, lo que la Cx5 elimina, y significa que podemos utilizarla mejor en cualquier otro lugar».
Con una interfaz de pantalla táctil de 3,5 pulgadas que es fácil de usar, y la resolución térmica de 160 × 120 revela la medición precisa de temperatura de objetivos cercanos entre -20 y 400 °C. Añada la FLIR Cx5 a su caja de herramientas y siempre estará listo para investigar equipos mecánicos y eléctricos alrededor de su centro de producción, sin permiso de trabajo en caliente a la vista.
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